La Bolsa de Comercio de Buenos Aires cumple 170 años

El presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Adelmo Gabbi, fue entrevistado para hablar sobre la próxima celebración de los 170 años de la BCBA. Recordó su vínculo desde niño con la institución: “Esto es mi vida”, dijo.

NEGOCIOS10/07/2024
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La vida institucional de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires cumple 170 años hoy 10 de julio. A pocos días de la celebración, la entidad sostiene la misma línea de conducta y los mismos valores que la vieron nacer en 1854. En su defensa de las libertades individuales y de la actividad privada, la Bolsa genera lazos con la sociedad, incorpora a las nuevas generaciones y continúa creciendo y expresando su solidez en cada uno de sus actos. Su actual presidente en representación de los socios es Adelmo Gabbi, quien cuenta con una historia personal de 61 años dedicados a una tarea que considera una pasión a la que dedicó y aún dedica la mayor parte de su tiempo. En mayo de este año fue reelecto por un nuevo período de un año al frente de la BCBA.

“Yo soy inversor, el único inversor presidente de la Bolsa en toda su historia. Siempre eran banqueros o empresarios, o personas reconocidas políticamente. Hasta que en el año 2000 ganamos las elecciones nosotros. Ahí participé como tesorero. Y ya me quedé definitivamente. Hace 61 años que estoy en la Bolsa. Esto es mi vida”, explicó Adelmo Gabbi.

Periodista: ¿Cómo fue su primer vínculo con la Bolsa de Comercio de Buenos Aires?
Adelmo Gabbi: La Bolsa fue mi pasión desde los 10 años. Yo vengo de gente del campo, del interior, y en aquella época los diarios llegaban a mi pueblo a la tarde. Y yo lo primero que hacía cuando volvía del colegio era mirar las cotizaciones de la Bolsa. Yo jugaba a armar un portafolio de inversiones, donde compraba y vendía. Y cada día miraba al cierre si había mejorado o no. Era un fondo imaginario que yo tenía. A los 15 años mi papá me regaló la suscripción al boletín diario de la Bolsa donde salían los balances. Fue una pasión irracional, algo que siempre me gustó.

P: ¿Cómo evalúa la relevancia institucional de este aniversario 170 de la BCBA?

AG: Es importante destacar la trascendencia que nos dan estos 170 años de vida. Somos la institución económica más antigua del país. Quizás el Club del Progreso tiene más años, pero no es una entidad económica. Y de acá nacieron algunas de las otras entidades, como la Sociedad Rural Argentina. Nació 12 años después que la Bolsa. Y por casualidad, el primer vicepresidente de la Bolsa, Martínez de Hoz, fue el primer presidente de la SRA. Nos une una historia.

Cumplir 170 años son muchos, sobre todo en un país joven como el nuestro y que atravesó muchas vicisitudes. A pesar de tantos vaivenes económicos la institución siempre se mantuvo. Y esa es la trascendencia. Es lo que nos da la fuerza para seguir viviendo. Y seguramente seguirá siendo así.

Si usted mira el cuadro con los retratos de los presidentes que está aquí en mi despacho puede ver que faltan cuatro espacios para completar. Muchos se preguntan qué va a pasar cuando no alcancen los espacios libres. Pero no saben que esas fotos antes eran mucho más grandes y que se achicaron para que entren más presidentes. Así que próximamente tendremos un cuadro más grande o serán más chicas las fotos. Pero la historia va a continuar.

P: ¿Cómo preparan la celebración para este nuevo aniversario?

AG: Para la celebración de los 170 años que realizaremos este 10 de julio vamos a armar un evento especial. En los últimos años los socios se acostumbraron a venir con algún acompañante. Y esta vez no podrá ser así porque se ha generado mucho interés en asistir y no hay espacio suficiente, entran no más de 900 personas. Y por eso vamos a hacer algo que no hicimos nunca: vamos a hacer dos reuniones el mismo día.

A las 18:00 será el acto de celebración con la presencia del presidente de la Nación. Vamos a empezar con el himno, que será cantado por alguna persona conocida. Después voy a hablar yo, con un discurso que va a durar entre seis y ocho minutos. Y luego hablará el Presidente.

Terminado ese acto, una hora y media más tarde, cada socio podrá venir con su acompañante para celebrar en el lunch tradicional que hacemos todos los años.

Pero tenemos un compromiso de palabra de que antes de fin de año tenemos que hacer una fiesta especial como hicimos con los 150 años. Una comida que será en la Rural seguramente. Para que todos vengan con su familia.

P: ¿Cómo es la vida institucional de la Bolsa desde la creación de BYMA?

 

AG: Hay algo que pocos saben. La Bolsa de Comercio de Buenos Aires es la única que existe en el mundo. Hay una Rosario, pero dedicada al mercado de cereales. Las otras son bolsas que no tienen mercado. Todas se transformaron en mercados. Acá también pasó eso. Fue a partir de 2012, cuando salió la nueva ley de Mercado de Capitales que eliminó a la Bolsa. En noviembre de ese año llamé a los tres agentes más grandes del mercado. Y les propuse hacer un mercado nuevo según la nueva ley. Porque había dos cosas que nadie tenía pero nosotros (el grupo del Mercado de valores y la Bolsa) sí teníamos, que era la Caja de Valores. Y lo otro que teníamos era un Tribunal Arbitral, con más de 70 años de funcionamiento. Ahora la bolsa es BYMA (Bolsas y Mercados Argentinos), donde tenemos el 30 por ciento de la sociedad. La Bolsa sigue cumpliendo su función institucional y además técnica de la relación con las empresas, que BYMA delega en la bolsa.

Políticamente la Bolsa es más fuerte ahora que antes de la ley de 2012. BYMA se ocupa de la operatoria, como hacía el Merval antes, y la Bolsa es la cara visible de lo que la gente supone que es la Bolsa. Hoy nadie dice que BYMA subió. Dicen que la Bolsa subió. Ya es una costumbre.

Byma se modernizó tecnológicamente y nosotros colaboramos en todo lo que podemos. Sobre todo dando absoluta libertad para operar sus negocios. Está manejado por gente muy seria que ha logrado resultados muy importantes.

 

Compromiso histórico con la cultura y educación financiera
P: Vemos que el aspecto cultural y educativo sigue siendo muy importante para la institución.

AG: Efectivamente. La Bolsa sigue teniendo su Fundación, que desarrolla la parte cultural. Y la de educación financiera. También mantenemos la parte política, dentro del Grupo de los Seis, con la Unión Industrial, la Cámara Argentina de Comercio, la Sociedad Rural Argentina, la Asociación de Bancos y la Cámara Argentina de la Construcción.

Mantenemos las puertas abiertas. Los socios siguen viniendo normalmente. En nuestras pizarras ya no está la tiza para anotar, pero se puede ver en pantallas cómo van variando los precios para que la gente pueda operar. Hay computadoras para que cada socio pueda sentarse a operar.

P: ¿Hay alguna medida iniciada en su gestión anterior que será completada o continuada en este nuevo año?

AG: En este momento estamos pensando en cómo distribuir en la sociedad de la Ciudad de Buenos Aires el dinero que tiene la Bolsa. Somos una entidad de la Ciudad de Buenos Aires, dado que cada ciudad del país tiene o tenía su bolsa de comercio.

En los últimos días estuvimos analizando la posibilidad de crear escuelas de artes y oficios en conjunto con el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Apuntamos a impulsar los viejos oficios, los no tecnológicos, sino manuales, que muchas veces faltan como gasistas, plomeros, carpinteros. Queremos llegar a la gente de menos recursos, más vulnerable, para abrir la puerta de acceso a escuelas gratuitas.

Ya hemos regalado una escuela en la villa 20 Papa Francisco. Y estamos dispuestos a colaborar con la ciudad en la parte educativa en todo sentido. Es algo que nos queda pendiente para completar en este año de gestión.

P: ¿Qué iniciativas están impulsando concretamente en materia de educación financiera?

AG: Uno de los objetivos que nos proponemos desde la Bolsa de Comercio es que la gente de la Ciudad de Buenos Aires, sobre todo la que cuenta con menores recursos, ingrese de lleno en la cultura del trabajo.

Nosotros tenemos una idea que estamos charlando con un banco nacional de regalar un dinero para abrir una cuenta de actividad bursátil a la totalidad de los alumnos de los colegios secundarios de la Ciudad de Buenos Aires.

Queremos que aprendan a comprar y vender acciones, a tener amor por el peso argentino, a no creer que todo es dólar. Porque acá en la Bolsa se opera en pesos argentinos. Si me preguntan cuánto vale el dólar, honestamente puedo tener una idea aproximada, pero nada más. En cambio, si me preguntan cuánto vale una acción casi le puedo decir el valor exacto.

Lo más importante del futuro de la Bolsa es la educación financiera en todos los ámbitos de la Ciudad, ya que pertenecemos a esta ciudad.

Queremos que la gente recupere el amor por el Peso Argentino
P: Tengo entendido que este año la Bolsa publicará su primer reporte de sostenibilidad. ¿Es así?

AG: Exactamente. Estamos trabajando en la sustentabilidad de las operaciones de la Bolsa de Comercio. Hemos contratado a un equipo que está dando los lineamientos generales para demostrar que la Bolsa es sustentable. Creemos que antes de fin de año vamos a tener casi terminado nuestro primer informe de sustentabilidad y lo presentaremos a la opinión pública.

La Bolsa sigue abriendo sus puertas a los socios, con personal que los atiende. Con personal en la Biblioteca, espacio que es muy importante para nosotros porque mantenemos una de las colecciones económicas más importantes del país, abiertas a los socios y a todo el público.

Y tenemos que tener en cuenta que de los 500 y pico de empleados que llegamos a tener, ahora tenemos 100 y pico. Y hay que demostrar la sustentabilidad de cada tarea.

A principios de la década pasada firmamos como Bolsa un acuerdo con Naciones Unidas y la Comisión Nacional de Valores de suscripción de los temas de emisiones de carbono en general. Sé que BYMA también está trabajando en ese tema.

Lo que también tiene la Bolsa es el Mercado Electrónico de Gas, uno de los pocos que hay en el mundo. Es propiedad 95% de la Bolsa y 5% de la Fundación de la Bolsa.

También aspiramos a transferir una parte de ese mercado antes de fin de año a los socios y luego cotizando en la Bolsa.

Es un mercado que funciona muy bien y donde todo el gas que se consume en Argentina pasa por ese mercado.

La Bolsa tiene un idioma propio, el de los precios
P: ¿Qué hace que la Bolsa de Comercio sea una institución tan especial para la realidad argentina?

AG: La Bolsa, a diferencia de cualquier otro sector, tiene un idioma propio. Porque el comercio, la industria, no tienen idiomas. Tienen productos para vender. La Bolsa tiene el idioma de los precios. Si los precios están subiendo significa que la realidad económica está mejor. Si los precios están para abajo, indica que las cosas no están mejor.

Acá tenemos en cuenta que, por ejemplo, los títulos públicos dolarizados estaban en 20 o 22% y ahora desde el inicio del año están en 57%. Esa suba de más del doble no se recuerda en la historia. Quiere decir que en general en el lenguaje bursátil que son los precios, determinamos cómo funciona el país. Porque hay más gente que compra que la que vende y eso hace subir los precios. Si anduviese mal sería al revés.

P: Para finalizar con un dato de color. ¿Cuáles son las empresas más antiguas que siguen cotizando?

AG: Hay una empresa que cumple este año 100 años cotizando, que es Ledesma. Y tenemos empresas que ya llevan más de 100 años, como Banco de Galicia y también Campaña Introductora de Buenos Aires. Pocos saben qué empresa es Introductora de Buenos Aires y sin embargo consumen sus productos todos los días. Es la fabricante de productos Dos Anclas.

Bolsa Joven: un foco de reunión financiero para las nuevas generaciones
Adelmo Gabbi, el presidente de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, destacó la iniciativa de “Bolsa Joven” que está desarrollando la institución con socios menores de 40 años.

“Para nosotros es una propuesta muy interesante y muy importante. Primero porque en este tipo de instituciones todo el mundo supone que hay pocos jóvenes. Pero no es así. De los últimos 500 socios que ingresaron en el último año, 450 son menores de 35 años.

Gran parte de esto se debe a la iniciativa Bolsa Joven. Está constituída por personas electas por ellos mismos, menores de 40 años. Y participan de la vida interna de la Bolsa sin limitaciones. El presidente de la Bolsa joven es consejero de la Bolsa.

La idea viene de que el Grupo de los Seis pensó en hacer un Grupo de los Seis Joven, hace ya varios años. Y cada entidad tenía en pequeña escala un grupo joven.

Hace poco hubo una reunión de junta directiva en la que explicaron las actividades de estos últimos seis meses. Tienen una concepción de educación financiera muy importante. Por ejemplo, ya lo han hecho y nos proponen continuar, con ir a clubes de barrio de la CABA a explicar pasos básicos de educación financiera.

Tenemos mucha expectativa con la gente joven, sobre todo porque la mayoría de quienes estamos en la mesa directiva de la Bolsa empezamos aquí desde muy jóvenes. Yo tenía 19 años cuando empecé a venir y me hice socio cuando pasé los 20 años. El secretario y el tesorero también empezaron muy jóvenes.

Hubo cambios estatutarios para fomentar el ingreso de gente joven. En este momento es mucho más fácil ingresar siendo joven que siendo mayor. Tenemos aspiraciones de pasar a ser un foco de reunión de la gente joven en el aspecto financiero.

El límite de edad mínima para ser presidente de la Bolsa no es muy exigente. Para ser presidente de la bolsa lo que importa es tener conocimientos internos, el tiempo que puede dedicar, y fundamentalmente el amor por esta tarea, por el honor de ser Presidente de la Bolsa. Somos apasionados por esto, como la pasión que uno pone en el fútbol cuando juega Argentina”, concluyó Adelmo Gabbi.

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