IMPACTANTE: la comida de Estados Unidos cambiará para siempre

En un giro sin precedentes hacia una alimentación más saludable, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS) y la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) anunciaron hoy un ambicioso plan para eliminar gradualmente todos los colorantes alimentarios sintéticos derivados del petróleo del suministro nacional de alimentos. La medida se enmarca en la iniciativa "Make America Healthy Again", una cruzada federal para reformar la industria alimentaria y proteger la salud pública, especialmente la de los niños.

Adiós a los colorantes tóxicos
El plan incluye la revocación de permisos, la incorporación de alternativas naturales y el inicio de una serie de investigaciones científicas de largo alcance. Entre los puntos más destacados:

Revocación inminente de los permisos para los colorantes Citrus Red No. 2 y Orange B, dos compuestos sintéticos con antecedentes polémicos.
Eliminación total, antes de fin de 2026, de los seis colorantes aún autorizados: FD&C Green No. 3, Red No. 40, Yellow No. 5, Yellow No. 6, Blue No. 1 y Blue No. 2.
Aceleración en la aprobación de colorantes naturales como extractos de Galdieria (algas), flor de guisante azul, gardenia blue y otros.
Solicitud a la industria de retirar el Red No. 3 antes del plazo previsto (2027-2028).
Colaboración con los NIH (Institutos Nacionales de Salud) para evaluar los impactos de los aditivos en la salud y el desarrollo infantil.
"Durante demasiado tiempo, algunas empresas alimentarias han estado alimentando a los estadounidenses con químicos derivados del petróleo sin su conocimiento ni consentimiento", declaró el secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr. "Estos compuestos venenosos no tienen ningún beneficio nutricional y representan peligros reales y medibles para la salud de nuestros hijos. Esa era está llegando a su fin".

 
Un modelo que sigue los pasos de Europa y Canadá
El comisionado de la FDA, Marty Makary, fue aún más directo: "Hoy estamos pidiendo a las empresas alimenticias que reemplacen los colorantes petroquímicos con ingredientes naturales, tal como ya hacen en Europa y Canadá. No deberíamos correr riesgos innecesarios con la salud de nuestros hijos, especialmente en medio de una epidemia de diabetes, obesidad, depresión y TDAH infantil".

Esta postura refleja un cambio radical respecto de décadas anteriores, donde los colorantes sintéticos fueron normalizados pese a los reiterados cuestionamientos de médicos, nutricionistas y organizaciones de consumidores.

¿Por qué es relevante?
Estados Unidos es uno de los países con mayor consumo per cápita de aditivos sintéticos en el mundo.
Diversos estudios han vinculado algunos colorantes con hiperactividad, alergias y problemas de conducta en niños.
La iniciativa podría influir en regulaciones de otros países, incluidos los de América Latina, donde muchos productos importados contienen estos aditivos.
Lo que viene
La FDA se comprometió a emitir nuevas guías para la industria y brindar flexibilidad regulatoria durante el proceso de transición. Además, la alianza con los NIH permitirá reforzar la investigación científica que sustente futuras decisiones regulatorias.

La era de los colorantes derivados del petróleo parece estar llegando a su fin en Estados Unidos. Y con ella, tal vez también comience una nueva etapa en la relación entre la industria alimentaria y los consumidores, una etapa basada en la transparencia, la evidencia y el respeto por la salud pública.